.jpg)
Pace adoptó a Naki'o y logró el dinero necesario para que el can pudiera volver a hacer una vida lo más autónoma posible. La sorpresa fue cuando la empresa que le construyó las piernas biónicas lo hizo de manera gratuita.
Naki’o rápidamente se adaptó a sus patas biónicas y después de unos pocos días ya estaba corriendo como si fueran parte de él. Aquí lo vemos en un día cualquiera de la vida de un perro biónico.
ver imagenes
No hay comentarios:
Publicar un comentario