Cacia Griggs sufría por su sobrepeso, pues a sus 26 años pesaba casi 115 kilos. La vida de esta mujer inglesa cambió cuando estuvo echada en la cama de su hija leyendo un cuento, pues rompió la cama de su pequeña.
Romper una cama no era normal; además, Cacia tenía la ilusión de casarse usando un vestido soñado. Pero eso no era lo único en la vida de Cacia, la joven madre pasó un momento vergonzoso cuando viajó de vacaciones y el cinturón de seguridad de avión no le quedaba. Su pequeña hija estaba aprendiendo sus mismas costumbres de ingerir comida chatarra, y Cacia se dio cuenta que algo no estaba bien.
La dieta de Cacia se inició en junio del 2011, donde dejó de lado los excesos en caloría, e inició una alimentación basada en verduras, batidos, sopas y barras de proteínas. La mujer asegura que su vida ha cambiado totalmente, pues ahora se siente más confiada en ir a comprar ropa.
‘Hace poco estuve leyendo ‘La oruga muy hambrienta’ a Isabelle, y ella se volteó y dijo ‘Ella era como tú ¿cierto, mami? Tú comías mucho y te pusiste gorda, pero ahora te convertiste en una bella mariposa’. Estallé en lárgimas. Una niña de cuatro años decía algo así, y realmente tenía sentido. Realmente he cambiado mi vida y la de mi familia, ahora no hay marcha atrás’, cuenta Cacia.
Romper una cama no era normal; además, Cacia tenía la ilusión de casarse usando un vestido soñado. Pero eso no era lo único en la vida de Cacia, la joven madre pasó un momento vergonzoso cuando viajó de vacaciones y el cinturón de seguridad de avión no le quedaba. Su pequeña hija estaba aprendiendo sus mismas costumbres de ingerir comida chatarra, y Cacia se dio cuenta que algo no estaba bien.
La dieta de Cacia se inició en junio del 2011, donde dejó de lado los excesos en caloría, e inició una alimentación basada en verduras, batidos, sopas y barras de proteínas. La mujer asegura que su vida ha cambiado totalmente, pues ahora se siente más confiada en ir a comprar ropa.
‘Hace poco estuve leyendo ‘La oruga muy hambrienta’ a Isabelle, y ella se volteó y dijo ‘Ella era como tú ¿cierto, mami? Tú comías mucho y te pusiste gorda, pero ahora te convertiste en una bella mariposa’. Estallé en lárgimas. Una niña de cuatro años decía algo así, y realmente tenía sentido. Realmente he cambiado mi vida y la de mi familia, ahora no hay marcha atrás’, cuenta Cacia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario